¿Cómo puedo denunciar una estafa en una compra por Internet? ¿Cómo puedo saber que páginas son seguras para hacer compras online? ¿Qué hago en caso de que me estafen al realizar una compra por Internet y cuáles son mis derechos como consumidor?
Las compras por Internet forman parte de nuestros hábitos de consumo habituales, pero con ello aumentan también los peligros de caer en una estafa. Por esta razón, debemos seguir siempre unas pautas para evitar, en la medida de lo posible, este riesgo al comprar o contratar un servicio con nuestras tarjetas bancarias.
Nuestros abogados especialistas en defensa del consumidor analizan este problema, por desgracia bastante habitual, para darte a conocer todo lo que debes saber si realizas compras por Internet, cuáles son tus derechos como consumidor y cómo activar los mecanismos de reclamación ante una estafa en compras por Internet.
Cómo identificar que páginas son seguras para comprar por Internet
Antes de realizar una compra, deberíamos saber identificar una serie de señales que nos estarían advirtiendo de que la web a la que queremos acceder para realizar la compra es segura.
Una de estas señales visuales se encuentra en la misma barra de dirección o “URL” de la “home” de la web.
En la parte superior izquierda de la página aparecen las siglas HTTPS o en su defecto, el dibujo de un candado cerrado, lo cual nos estará indicando que la página es segura y tiene el certificado SSL. Se trata de un protocolo de seguridad que nos dice que los datos que se van a compartir entre usuario y página web navegan de forma segura por la red.
Por el contrario, si no puedes acceder a verificar la información del comerciante como son por ejemplo sus datos fiscales como empresa, ubicación o sus datos de contacto, etc., esto nos dará una idea de que la web es poco o nada segura.
Por otra parte, son señales sospechosas que la web tenga precios mucho más barato que el resto de mercado o que las reseñas o comentarios en foros, sean negativos o de que ya nos estén advirtiendo de una situación previsiblemente fraudulenta.
Por supuesto que, a la hora de decidirnos por realizar la compra, siempre debemos optar por un medio convencional de pago y que se encuentre disponible en la misma web: PAYPAL, tarjeta bancaria, contra reembolso, etc. y nunca hacerlo externamente como es ahora bastante común en este tipo de estafas solicitar el pago por “bizum”.
¿Qué hacer si me estafan al comprar por Internet?
Desde nuestro despacho de abogados expertos en defensa del consumidor recomendamos, primero tener en cuenta las indicaciones anteriormente citadas, y en caso de que tal caso ocurriese, recabar todas las pruebas posibles del cargo fraudulento. Realizar capturas de pantalla de todo lo relacionado con la web y también por otros medios con los que se haya tenido contacto con los estafadores: mensajes por WhatsApp o en las redes sociales, llamadas telefónicas, etc. así como del recibo bancario con el que se pagó la compra.
El siguiente paso es acudir a las autoridades, Guardia Civil o Policía Nacional más cercanas al lugar de los hechos para interponer denuncia y que de esta manera se de paso al inicio de la investigación de los hechos.
Cuando el caso llegue al juez instructor competente, valorará lo hechos denunciados, calificándolos como delito leve de estafa (menor a 400€) con penas de multa de uno a tres meses con cuotas diarias que van desde los dos hasta los cuatrocientos euros diarios, o delito “menos grave” o “grave” de estafa si la cantidad supera la cifra mencionada y que podría acarrear penas de hasta tres años de prisión. Penas establecidas en el artículo 248 del Código Penal.
Por último, reseñar que el Código Penal estable que la víctima tendrá derecho a reclamar el resarcimiento de los daños y perjuicios derivados del proceso penal y solicitar la devolución íntegra de todo el dinero estafado y cuantos daños se deriven del delito cometido.
Si crees que estás siendo víctima de una estafa por Internet, no dudes en ponerte en contacto con nosotros para recuperar tu dinero. Te recomendamos hacerlo desde el primer momento que se detecta la estafa para acortar los plazos en procedimiento y asegurar la devolución íntegra del dinero estafado, así como de las costas de los daños ocasionados.