El agitado mundo del derecho nos recuerda cada día aquello que nos enseñó Heráclito 480 años AC: que todo fluye y que nada permanece.
Es por eso que en Lidiare nos ocupamos de programar espacios de formación permanente para nuestros equipos de abogados. El pasado 27 de febrero finalizó un nuevo ciclo de formación de compliance a los más de 40 despachos que integran la red nacional de Lidiare.
Una formación que ha puesto el foco en el proceso de implementación del compliance a las pymes españolas. Estas que representan el 99,80% del tejido empresarial de nuestro país y que constituyen el centro de atención en el que operan la mayoría de nuestros abogados.
Hemos disfrutado de una formación alejada del formato habitual en el que se imparte y se debate sobre los contenidos normativos.
El mayor valor de esta formación es que ha sido desarrollada en el contexto de la práctica del día a día de un programa de compliance para la pequeña y mediana empresa. Paso a paso, transitando por todo el proceso de implementación, formación a empleados y supervisión, vigilancia y control de la fase de seguimiento.
Agradecemos el planteamiento práctico expuesto por los penalistas Rafael Moya Jover, miembro del Comité de Compliance y Pymes de la Word Compliance Association y coautor de la “Guía de implementación del compliance en las pymes” editada por la WCA y a Alfonso Vicens Rodríguez, miembro del Equipo de Contenidos de Compliance en Tirant Compliancers.
En Lidiare somos partidarios de pensar que igual que el cambio es infinito nuestra actitud de aprendizaje debe ser infinita. La formación continua es la mejor herramienta para conectar con las necesidades de nuestros clientes.
