La seguridad en el lugar de trabajo debe ser una prioridad innegociable para las empresas. Sin embargo, incluso con las mejores precauciones, los accidentes laborales pueden ocurrir, y éstos pueden ir desde un accidente leve que no vaya más allá, hasta uno calificado como grave o incluso, muy grave.
Ante este escenario, las empresas se enfrentan a la crucial tarea de gestionar de manera efectiva los incidentes laborales, no sólo para garantizar la continuidad de sus operaciones, sino también para salvaguardar la integridad y derechos de sus trabajadores.
En este contexto, surge la inevitable pregunta: ¿Qué medidas debe tomar una empresa en caso de accidente de trabajo? Partimos de la base de que toda empresa tiene la obligación de garantizar la salud de sus trabajadores, aunque es cierto, que siempre pueden ocurrir accidentes, por muchas medidas que se tomen, pero cuanto más cubierta esté la empresa en materia de seguridad, más protegidos estarán los trabajadores y la empresa en sí.
¿Qué es un accidente laboral y qué tipos de accidentes existen?
Lo primero que debemos conocer es qué es un accidente laboral, ya que no todos los accidentes que se producen mientras trabajamos son catalogados como laborales.
Para ello debemos remitirnos al Real Decreto Legislativo 8/2015, de 30 de octubre, donde se indica que “Se entiende por accidente de trabajo toda lesión corporal que el trabajador sufra con ocasión o por consecuencia del trabajo que ejecute por cuenta ajena.”
Es decir, se considera accidente de trabajo el que se produce durante el desarrollo del mismo, pero también, por ejemplo, es un accidente laboral el que tiene lugar durante el camino de ida o vuelta al trabajo, ya que es una consecuencia indirecta de la actividad laboral.
En cuanto a los tipos de accidentes de trabajo, estos pueden ser muy variados. Vamos a ver los más comunes en el mundo laboral:
- Accidentes “in itinere”: son los que ocurren de camino al trabajo o durante la vuelta a casa tras haber finalizado la jornada laboral.
- Accidentes de misión: tienen lugar cuando el trabajador sale del lugar de trabajo y se desplaza a otro sitio para realizar una actividad laboral.
- Accidentes por realizar actividades diferentes: este tipo de accidentes ocurren cuando un trabajador está haciendo una tarea que no le corresponde y para la quizás, no está cualificado.
- Accidentes durante una actividad sindical: tienen lugar mientras que el trabajador realiza funciones de carácter sindical o cuando se desplaza para llevarlas a cabo.
- Enfermedades contraídas en el trabajo: en este caso, el trabajador enferma por causa del trabajo, y ésta debe estar directamente relacionada con la actividad laboral.
- Accidentes ocasionados por otros trabajadores de la empresa: Estos accidentes laborales son consecuencia directa o indirecta de los delitos o malas prácticas de otros miembros de la empresa, ya sea el empresario, otros empleados o una persona vinculada de alguna forma a la compañía.
¿Qué hacer en caso de accidente laboral?
Siempre que ocurre un accidente laboral, deben investigarse las causas que lo provocaron y qué medidas se deben tomar. En la investigación debe haber dos fases: la fase técnica y la administrativa.
- Fase técnica:
Lo primero que debe ocurrir es que el afectado informe a su jefe, para que éste pueda activar el procedimiento y comunicar el accidente a la persona responsable, ya sea el responsable de PRL o el de Derechos Humanos, por ejemplo.
Tras esto, se debe recopilar toda la información posible de las causas que provocaron el accidente para analizarlas posteriormente. También se debe reunir información acerca del propio accidente: cómo ocurrió, qué personas están implicadas, si hay algún equipamiento implicado o no y cuál, etc.
Una vez que se saben las causas que provocaron el accidente de trabajo, se deben tomar medidas que eviten que ocurra de nuevo y hacer un seguimiento de las mismas, para ver si son eficaces.
- Fase administrativa:
El jefe de la empresa tiene la obligación de notificar por escrito los accidentes de trabajo que sufren los empleados. Esto se notifica a la autoridad laboral pertinente, y en el caso de accidente muy grave, o incluso defunción, el periodo de aviso no puede ser superior a 24 horas.
Toda esta información puede ser consultada en el artículo 23 de la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales. Otra opción es que, en caso de duda, contactes con un abogado laboralista experto en accidente laboral, para que te asesore en el proceso.
¿Quién está protegido en caso de accidente laboral?
En el caso de que seas un trabajador por cuenta ajena y sufras un accidente de trabajo, la ley te protege aunque no estés dado de alta en la Seguridad Social. También se aplica al caso de que no hayas cotizado a la Seguridad Social antes del accidente.
En el supuesto de que seas empleado de una empresa y tengas un accidente laboral, estás en el derecho de recibir asistencia de tipo sanitario. Incluso si trabajas como autónomo tienes protección, ya que para eso una parte de tu cotización engloba las contingencias profesionales.
En definitiva, el mundo de los accidentes laborales puede ser muy complejo y causarte algún quebradero de cabeza. Por eso, en caso de no saber cómo actuar o qué procedimiento seguir, te recomendamos acudir a un abogado especializado en derecho laboral y en accidentes de trabajo, ya que te orientará de cara a tomar decisiones informadas y evitar que se vuelva a dar la misma situación de nuevo.
